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Cómo juegan los perros entre sí
Los perros son conocidos por su energía inagotable y su espíritu lúdico. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo los perros distinguen entre el juego y una verdadera pelea? Vamos a sumergirnos en el mundo del juego canino y descubrir los secretos de sus interacciones lúdicas.
Juego versus Pelea
Cuando dos perros se reúnen, sus actividades pueden parecerse a una pelea. Pueden correr, pelear, morderse y perseguirse mutuamente. Sin embargo, hay una diferencia crucial. El juego se caracteriza por su naturaleza aleatoria, frenética y rápida. Es la forma en que los perros se aseguran de que se están divirtiendo y no intentando iniciar una pelea.
Mentes activas
Los perros tienen mentes increíblemente activas. Pueden procesar información rápidamente y con precisión, incluso mientras están en movimiento. Esta capacidad cognitiva les permite mantener el juego ligero y divertido. Son pensadores rápidos que se aseguran de que su tiempo de juego sea una diversión.
Juego limpio
Cuando los perros de diferentes tamaños juegan juntos, el perro más grande a menudo se contiene para evitar conflictos o lesiones. Los perros tienen un sentido de la equidad y saben que mantener el juego es más importante que ganar. A veces, incluso intercambian sus roles durante el juego para garantizar la equidad. Un perro dominante podría darse la vuelta y tumbarse de espaldas, una acción que nunca tomaría en una verdadera pelea.
Las cuatro reglas
Los perros muestran cuatro aspectos esenciales del juego limpio:
- Preguntar primero: Los perros se invitan mutuamente a jugar, a menudo con una invitación clara y juguetona.
- Ser honesto: Comunican sus intenciones claramente.
- Seguir las reglas: Los perros siguen un libro de reglas no escrito durante el juego.
- Reconocer cuando te equivocas: Si cometen un error, vuelven rápidamente al juego limpio.
Entender las señales
Los perros son excelentes para entender las señales durante el juego. Pueden leer lo que están haciendo otros perros y confían en que todos quieren jugar en lugar de pelear. Esta confianza es fundamental para mantener el juego ligero y agradable.
Acciones lúdicas
Los perros tienen varias acciones durante el juego:
- Invitación al juego: Esto es cuando un perro se agacha sobre sus patas delanteras, a menudo acompañado de ladridos y meneo de cola. Es una invitación clara para jugar y establece el escenario para otras conductas lúdicas.
- Patas en la cara: Los perros pueden tocar la cara del otro con una pata, una forma amistosa de interactuar.
- Perseguir y retirarse: Se acercan rápidamente y se retiran para mantener el juego emocionante.
- Esquivar: Los perros se mueven de izquierda a derecha para evitar al otro.
- Juguetear o morder: Aunque pueden juguetear o morder, no es agresivo. Todo es en tono amistoso.
- Correr directamente uno hacia el otro: Un ataque juguetón agrega emoción al juego.
¿Juego o parece una pelea?
A veces, puede parecer que dos perros están a punto de pelear cuando juegan intensamente. Pero siempre que se turnen, se imiten mutuamente y sean justos, generalmente se evitan conflictos reales. Sin embargo, es importante supervisarlos, especialmente si hay una gran diferencia de tamaño o edad entre los perros. No querrías que ocurrieran accidentes durante su tiempo de juego.
Señales de tiempo fuera
Los perros tienen su propia manera de decir: "Hagamos una pausa". Pueden dejar de jugar para olfatear o estornudar, rascarse un poco o lamerse, o sacudirse el pelaje. Estas son sus señales para una breve pausa en la diversión.
Importancia de la socialización
Para los perros que no han tenido suficiente socialización o no han aprendido las buenas maneras de juego, las interacciones con otros perros pueden ser desafiantes. Algunos perros pueden jugar demasiado brusco o adoptar comportamientos inapropiados, como montarse unos a otros. Por eso, la socialización temprana es fundamental, ya sea como cachorro o con la orientación de un entrenador o un club local de obediencia. Les enseña a los perros las reglas de interacción con sus amigos de cuatro patas.
En conclusión, observar a los perros jugar entre sí no solo es entretenido, sino también una visión fascinante de sus habilidades sociales y cognitivas. Su capacidad para mantener el juego ligero y justo es un testimonio de su inteligencia y su habilidad para divertirse. Así que la próxima vez que veas a dos perros jugando, sabrás que no solo están jugando, sino también comunicándose y fortaleciendo sus lazos de una manera única y encantadora.
Sobre el autor
Nacida y criada en la ciudad de Madrid, Nora siempre ha sentido un gran amor por los perros. Sus padres, ya jubilados, trabajaban como veterinarios cuando ella era pequeña, lo que despertó su interés por el cuidado de los animales desde muy pronto.
