Dulce perro entregado al refugio, espera encontrar dueños que nunca lo abandonen
Cuando abrazamos a nuestros perros por primera vez y nos los llevamos a casa, prometemos estar siempre a su lado.
Los perros se sienten seguros con nosotros porque saben que nos pertenecen.
Por desgracia, algunos propietarios no se lo piensan bien antes de llevarse un perro.
Entonces podrían entregarlos a un refugio, lo que puede ser muy difícil para el perro.
Drake, un perro dulce y leal, se sintió muy triste cuando su familia lo llevó a un refugio porque no tenían tiempo suficiente para él.
Drake no entendía por qué tenía que abandonar su casa. Estaba dolido y confuso.
Cálida acogida en el asilo
Drake fue acogido calurosamente por el personal y los voluntarios del refugio, que le colmaron de afecto y le ofrecieron consuelo durante su estancia.
Ilona, una amable voluntaria del refugio, se fijó en los ojos grandes y tristes de Drake.
Dijo : "Tiene una cabeza y una sonrisa tan grandes y un cuerpecito tan musculoso".
Ilona sabía que tenía que ayudarle.
Por desgracia, en el condado de Prince George's está prohibida la tenencia de pit bulls, por lo que Drake no pudo encontrar un hogar allí.
Como el refugio ya estaba lleno, Drake corría el riesgo de ser sacrificado para hacer sitio.
Cuando el nombre de Drake apareció en la lista de eutanasia, un compasivo empleado del refugio reconoció la urgente necesidad de rescatarlo y actuó para salvar al precioso perro.
Se pusieron en contacto con Vindicated Pit Bull Rescue y les preguntaron si podían rescatar a Drake.
La organización de rescate aceptó y recuperó a Drake del refugio.
Drake permaneció unos días en un hogar de acogida temporal antes de pasar a un hogar de acogida permanente.
Sin embargo, esta familia no pudo retenerlo mucho tiempo debido a una emergencia familiar.
Drake volvió a su hogar de acogida temporal, donde fue recibido con los brazos abiertos.
Otro revés decepcionante
Poco después, la organización de rescate recibió una gran noticia: Drake había encontrado una familia cariñosa que quería adoptarlo.
Estaba encantado de empezar un nuevo capítulo de su vida con ellos.
Pero las cosas no salieron como estaba previsto.
El nuevo hermanito de Drake no lo aceptó y, al cabo de tres semanas, su nueva familia decidió que no podía quedarse con él.
Lo devolvieron al refugio.
Cuando Drake regresó, parecía ansioso y alterado. Necesitaba una familia de acogida cariñosa para volver a sentirse seguro y querido.
La organización de rescate se puso en contacto con Ilona y le preguntó si podía hacerse cargo de Drake.
Le explicaron que la familia adoptiva de Drake había tenido que renunciar a él y que esperaban que Ilona pudiera ofrecerle un hogar estable y cariñoso.
Una cariñosa familia de acogida
Ilona y su marido decidieron ayudar.
Ya tenían un perro Honey Pie y un bebé propio, pero abrieron sus corazones a Drake.
Le ayudaron a sentirse seguro y querido.
Drake miró a Honey Pie e imitó su comportamiento. Los dos perros se hicieron muy amigos y disfrutaban paseando juntos.
Drake es muy cariñoso y le gusta dar besos a su familia de acogida.
"Quiere mucho a mi marido, lo cual es genial. Y quiere mucho a nuestro bebé. Tienen un vínculo increíble", añade Ilona.
Esperanza en el futuro
Drake sigue esperando un hogar para siempre. Ilona y su marido desean que Drake encuentre un hogar donde le quieran y no le abandonen nunca más.
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