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El Goldendoodle que sobrevivió a un accidente se recupera milagrosamente después de tres semanas
Agosto de 2018 siempre dejará un sabor amargo a la familia Orr, de Kansas.
En el mes en que todo el mundo se relajaba y disfrutaba del verano, los Orr habían perdido a su ser querido.
La madre de la familia, Jennifer, y su hija, Sam, habían sufrido un terrible accidente. Su Jeep se estrelló 600 metros por una carretera de montaña en el condado de Chaffee, Colorado.
La madre no sobrevivió.
Junto a ellos iba un Goldendoodle de un año, Bentley.
Esta tragedia fue dolorosa y terrible, no sólo para la familia, sino también para quienes no conocían a Sam y Jennifer.
El único punto positivo en estos difíciles momentos para padre e hija era la esperanza de que Bentley hubiera sobrevivido.
De alguna manera, el cachorro había salido catapultado del Jeep, dejando a sus dueños esperando su regreso.
¿Podría ser?
¿Podría un Goldendoodle sobrevivir tres semanas solo en las montañas, lejos de su hábitat natural?
Nadie podía creerlo, pero Bentley demostró lo contrario e hizo felices a dos personas a pesar de todo su dolor.
El viaje que lo cambió todo
En 2017, Samantha Orr aún era una joven que estudiaba en el extranjero. Cuando su aventura internacional llegó a su fin, tuvo una idea abrupta que tenía que cumplir:
Cogió un perro en cuanto volvió a Estados Unidos.
Aunque su familia quería mucho a los perros, advirtieron a Sam de que un perro conlleva una gran responsabilidad.
Pero a la joven le daba igual. Realmente quería un perro. Iba a ser su primera compra adulta.
Entonces Bentley entró en sus vidas
Bentley era un cachorrito, un Goldendoodle que Sam se llevó a casa 24 horas después de regresar a Estados Unidos. El vínculo se estrechó al instante y Sam no tuvo que hacer ningún esfuerzo para adaptar su vida a Bentley o hacer que todo fuera a prueba de cachorros.
¿Por qué?
¡Porque Bentley se había adaptado de inmediato! Su primera presentación fue el primer paseo en jeep al que Sam lo llevó en 2017. Le encantó cada segundo y resultó ser un gran cachorro.
Desde entonces, Bentley iba a todas partes con Sam como su fiel compañero.
No podría haber deseado nada mejor.
Casi exactamente un año después, tras su primer paseo en jeep, ocurrió algo inesperado.
Tras reparar el viejo Jeep de su abuelo, la familia Orr se embarcó en una nueva aventura. Esta vez se trataba de una ruta difícil: un sendero todoterreno 4×4, también conocido como la mina Iron Chest, la favorita de su madre.
Sam no recuerda mucho del accidente. De repente, sintió que el Jeep rodaba y que las cosas volaban a su alrededor, incluido su perro Bentley.
Sam perdió a su madre aquel día, y el dolor se intensificó cuando descubrió que Bentley también se había ido.
Sam acabó en el hospital tras el accidente y esperaba que encontraran a Bentley antes de que sufriera más lesiones.
¿Has visto a este perro?
Los grupos de apoyo de Facebook y las búsquedas organizadas comenzaron casi inmediatamente después del accidente. Todo el vecindario se implicó para ayudar a Bentley a volver a casa.
La noticia del accidente y de la terrible pérdida se extendió por todo el estado. Los medios de comunicación se hicieron eco de la historia, los grupos de noticias informaron al respecto y la gente se mostró realmente interesada en ayudar a Sam y a la familia Orr a volver a sonreír tras su horrible pérdida.
Los teléfonos sonaban continuamente y algunos incluso llamaban para hacer creer a Sam que tenían a Bentley, sólo para conseguir la recompensa.
La gente puede ser cruel.
Pero una llamada telefónica marcó la diferencia y dio a Sam otro rayo de esperanza:
Alguien había visto a Bentley.
Un hombre llamado Joe llamó a Sam y le dijo que había visto a Bentley y lo había reconocido en los carteles. Lo habían visto muy por encima del sendero, cazando ratones de roca.
Un perro de diseño pura sangre increíblemente mimado estaba en su modo de supervivencia ¡comiendo ratones de roca!
¿Cómo de milagroso era este perro?
Después de 19 largos días, Sam por fin tuvo la confirmación de lo que le decía su corazón.
Bentley seguía vivo y ahora era el momento de llevarlo a casa.
La caminata para salvar a Bentley
El sábado, Sam estaba de nuevo en pie, lista para la expedición que le devolvería a su cachorro.
También recibió noticias del equipo que había recuperado su Jeep accidentado. Dijeron que habían visto a Bentley y que les estaba ladrando.
El pobre cachorro era tan leal que se quedó cerca del lugar del accidente, vigiló su Jeep y esperó a que su querida familia viniera a buscarlo.
A 3 km de altura, Sam podía verlo claramente con sus prismáticos:
Allí estaba. Bentley la estaba esperando.
La subida empezó a las 9.30 de la mañana. A Sam le encantaba la montaña, pero no estaba preparada. Te la imaginas subiendo y bajando en zapatillas de deporte?
Sí, eso es lo mucho que quería a ese Goldendoodle.
Con las costillas magulladas y una vértebra comprimida, Sam superó sus límites y se abrió camino hasta la cima, impulsada por su amor a Bentley.
Cuando por fin llegó a la cresta, Bentley estaba a unos 15 metros de ella. Uno esperaría que su perro viniera volando a sus brazos. Pero después de 19 largos días, Bentley estaba demasiado asustado para avanzar.
Cada vez que Sam daba un paso adelante, Bentley retrocedía cinco hacia la montaña. A este paso, nunca lo lograrían.
Sam siguió a Bentley hasta otra cresta, y otra, y otra...
¿A qué altura subirá este cachorro?
Entonces Sam recordó algo que había leído sobre cómo tratar con perros que estaban en modo de supervivencia.
Se dio la vuelta y empezó a alejarse de Bentley, asegurándose de que la seguía. Eso despertó el interés del cachorro y poco a poco empezó a seguir a Sam hasta donde ella subió por primera vez.
Luego se sentó a descansar un rato, abrió una lata de golosinas y esperó.
Poco a poco, Bentley se acercó mucho a Sam... todavía un poco reacio, pero muy interesado en lo que ella tenía que ofrecer.
Fue entonces cuando Sam grabó el vídeo viral de Bentley. El cachorro reconoció por fin a su llorosa mamá y caminó lentamente hacia sus brazos, rompiendo el corazón de Sam en pedazos y volviéndolo a recomponer.
¿Dónde está Bentley hoy?
Bajar la montaña fue mucho más fácil tanto para Sam como para Bentley. Tomaron el otro lado de la montaña y se apresuraron a bajar. Este pequeño por fin se iba a casa.
Bentley parecía estar bien e ileso. Sin embargo, estaba gravemente deshidratado y hambriento.
Durante los primeros días en casa, Bentley fue muy protector con su comida. Comía cada comida como si fuera la última. Sólo Dios sabe cómo consiguió sobrevivir 19 días sin comida ni agua suficientes en las montañas.
Afortunadamente, no le pasaba nada más y la familia Orr empezó a vivir su vida día a día.....
Traer de vuelta a Bentley supuso una enorme alegría para Sam y su padre, pero seguían lidiando con la pérdida de su madre.
"También añadimos otro bebé peludo a la familia, "Buena", su hermanita, llamada así por todo lo que nuestra familia tuvo que soportar en Buena Vista, Colorado. Ojalá mi madre estuviera hoy aquí para conocer a la pequeña Buena, le robaría el corazón. Y estoy segura de que mi madre estaría muy orgullosa de Bentley y de mí", dice Sam en su página web.
Y hoy, cinco años después, Bentley sigue viviendo con Sam. Le encanta su vida, sobre todo ahora que tiene una hermana con la que jugar.
Todos lo sentimos mucho por esta familia y esperamos que lleven a su madre Jennifer en el corazón para siempre.
En cuanto a Bentley, esperamos que se mantenga alejado de las aventuras extremas. Una ya fue demasiado.
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