Una triste madre perra que perdió a sus cachorros adopta a 3 gatitos abandonados
He leído muchas historias sobre perros, pero las más difíciles de procesar suelen ser aquellas en las que los cachorros pasan por algo terrible.
Son tan pequeños y frágiles que, cuando ves que les ocurre algo terrible, es difícil de soportar, porque los pequeños ni siquiera han tenido la oportunidad de empezar su vida.
Esta historia trata de una madre perra que perdió a sus cachorros y adoptó gatitos.
El trágico día de Milo
Milo es un dulce perrito callejero que fue rescatado cerca de la frontera mexicana con Arizona.
El amable hombre la llevó a Sunshine Dog Rescue. Cuando la acogieron, descubrieron que Milo estaba embarazada.
No había avanzado mucho en su embarazo, por lo que Milo sufrió un shock desgarrador cuando se puso de parto prematuramente. Por desgracia, ninguno de sus cachorros sobrevivió al parto.
El corazón de Milo se hundió cuando descubrió que ninguno de sus cachorros había sobrevivido.
Se convirtió en una perra muy triste, siempre mirando a su alrededor con la esperanza de encontrar a sus pequeños.
Anita Osa, una amable persona que trabajaba en Sunshine Dog Rescue, vio la angustia de Milo y decidió ayudarle.
Una adopción sorprendente
Anita preguntó a la gente si tenían cachorros que necesitaran una madre.
Las personas que respondieron dijeron que sólo tenían gatitos.
Para no desanimarse, Anita decidió intentarlo y le trajo tres gatitos a Milo.
Anita Osa: "Recogí tres pequeños nuevos. A ver qué le parecen a Milo".
Milo conoce a los gatitos
Para sorpresa de todos, Milo acogió a los gatitos con las patas abiertas.
Ella respondió con calma y cariño. Poco a poco, los gatitos empezaron a sentirse como en casa y se aferraron a Milo.
Anita se aseguró de que estuvieran bien alimentados y felices.
Anita Osa: "Desde el principio, les di suplementos y biberón. Pero les reconfortaba la leche materna".
Un vínculo especial
Milo y los gatitos formaban una familia especial.
Milo, a pesar de su triste pasado, se convirtió en una madre cariñosa para los tres gatitos.
Gumball, uno de los gatitos, recibió una atención especial de Milo. No le dejaba alejarse y siempre le tenía cerca y a salvo.
Encontrar un nuevo hogar
Con el tiempo, Milo y los gatitos se convirtieron en una familia feliz.
Cuando llegó el momento de que Milo encontrara un nuevo hogar, un hombre llamado David la adoptó.
La hermana de David, a quien le encantaban los gatos, decidió adoptar a uno de los gatitos.
Un final feliz para Milo
Milo y Gumball se quedaron juntos y los otros dos gatitos también encontraron hogar.
"Estos gatitos tuvieron una madre que no habrían tenido de otra forma. Que tenga un final tan conmovedor es algo muy bonito para nosotros". dijo Anita Osa.
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