Beagle abandonado con ojos tristes pasa sus últimos meses en un hogar lleno de amor

Amira_Lopez
Por Amira López
Actualizado: 21 noviembre 2024
Achtergelaten Beagle met droevige ogen brengt laatste maanden door in liefdevol huis 1

Los perros necesitan muy poco. Lo único que quieren es una cama mullida, buena comida y alguien que les quiera hasta que crucen el Puente del Arco Iris.

Stella, una dulce mezcla de beagle de 10 años, tuvo un comienzo difícil en la vida.

Fue abandonada con otros cinco perros en casa de un amigo de su dueño.

Era una situación desgarradora, pero afortunadamente eso cambió para Stella.

Frosted Face Foundation (FFF), un grupo que rescata a perros ancianos, recibió una llamada sobre Stella.

Una amable voluntaria, Janet Citriniti, condujo varias horas para rescatar a Stella y llevarla a su refugio seguro.

Sin embargo, Stella era extremadamente tímida y los posibles adoptantes no se fijaron en ella en la Pasadena Humane Society.

Para ayudarla a mostrar su verdadero carácter, otra voluntaria, Sue King, llevó a Stella a una aventura de dos semanas llamada "Frosted Fling".

"Desafortunadamente, se descubrió que Stella tenía soplos cardíacos y una enfermedad valvular degenerativa crónica cuando llegó a Frosted Faces Foundation y se consideró terminal", escribió FFF.

Amor a primera vista

A pesar de sus problemas de salud, los ojos grandes y tristes de Stella llegaron al corazón de una familia: Janice y Tyson Krehbiel.

Decidieron adoptarla y prometieron quererla en sus últimos días de vida.

La familia Krehbiel dijo: "No hay nada mejor que dar una vida cómoda a un perro viejo".

Nuevo hogar para Stella

Stella supo que por fin tenía un hogar. Empezó a mostrar su verdadero yo y se volvió más abierta.

La familia Krehbiel compartió información actualizada con FFF, describiendo a Stella como "una anciana genial".

Disfrutaba patrullando el jardín con sus hermanos caninos, probando diferentes camas para perros y rockeando al ritmo del rock clásico de los 70.

Una hermosa despedida

Pocos meses después de encontrar su nuevo hogar, Stella murió.

La familia Krehbiel, derrotada pero agradecida, compartió:

"Estamos muy tristes por haberla tenido tan poco tiempo. Descansa en paz querida Stellla, eras una ( perla)".

Janice, la madre de Stella, dijo: "Puede que su anterior dueño se olvidara de ella, pero la Fundación Frosted Faces no lo hizo y nunca lo haremos".

La historia de Stella nos recuerda que, incluso en el ocaso de sus vidas, estas viejas almas merecen amor, cuidados y un lugar cálido al que volver.

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