Un gran danés hambriento comió piedras para sobrevivir hasta que alguien acudió al rescate

A pesar de que hay innumerables perros esperando su futuro mejor, hay historias que te devuelven la fe en la humanidad. Esta es una de ellas...

Cuando un cachorro de gran danés, Angelo, fue encontrado en la calle, era prácticamente una causa perdida. Este pobre chico estaba gravemente desnutrido y ya no podía mantenerse en pie.

Pero entonces ocurrió algo maravilloso. Una mujer que rescata perros callejeros de forma voluntaria se ofreció a ayudar. Sin embargo, el caso de Angelo no era fácil, ya que seguía necesitando atención médica seria.

Angelo estaba a punto de morir

La razón por la que este gran danés apenas se movía parecía ser que tenía piedras en el estómago. Por desgracia, Angelo estaba tan desnutrido y hambriento que comía piedras para mantenerse con vida.

Tenía el vientre lleno de piedras y, por lo tanto, no podía comer ni defecar cuando lo trajeron al refugio. Se trataba de una enfermedad potencialmente mortal y necesitaba una intervención quirúrgica inmediata, pero incluso entonces el futuro de este gran danés no estaba garantizado.

Cómo Hanan y su organización rescatan a Angelo

Hanan, voluntaria de la organización de acogida Furever Rescue, hizo todo lo que pudo para ayudar a Angelo a sobrevivir. La operación era cara y requería un largo proceso de recuperación, así que decidió buscar ayuda en las redes sociales.

Justin Finning y su esposa Deborah vieron la foto de este pobre chico y, aunque estaba lejos de su casa, hicieron todo lo que pudieron para ayudar a este perro.

Justin, Deborah y Angelo estaban hechos el uno para el otro.

Este no era el primer gran danés que Justin y Deborah decidían rescatar.

Esta pareja tiene más de 30 años de experiencia en el rescate y cuidado de gran daneses con discapacidades. Cuando se enteraron del caso de Angelo, enseguida supieron que querían ayudar a salvarle la vida.

Pero el problema era que Angelo estaba en otro país. No podía volar hasta que le operaran. Junto con Hanan, esta pareja inició una campaña de recaudación de fondos para reunir el dinero necesario para el tratamiento de Angelo.

Además de la cirugía inicial, necesitaba fisioterapia e hidroterapia, además de una dieta especializada, que resultaba extremadamente cara.

Afortunadamente, la encantadora pareja tuvo éxito en esta maravillosa misión y Angelo obtuvo la ayuda que tan desesperadamente necesitaba.

La operación fue un éxito y ahora el niño necesitaba tiempo para recuperarse antes de volar a su nuevo hogar. Cuando por fin llegó el momento, Hanan escribió en su Facebook:

Un niño feliz en su nuevo hogar

Justin y Deborah estaban decididos a ayudar a Angelo a recuperarse por completo. Le llevaban regularmente a sus sesiones de terapia y, al cabo de unos meses, este precioso niño se había recuperado por fin por completo.

Ya no es un perro tímido y reservado, sino un gran danés feliz y enérgico al que le encanta ser el centro de atención. Corre, juega en su nuevo y espacioso patio trasero y va a la playa con su familia.

Pero lo que más le gusta de su nueva vida son sin duda sus nuevos compañeros de piso.

Sin embargo, lo que más le gusta de su nueva vida son sin duda sus nuevos compañeros de casa. Vive con otros tres perros y disfruta mucho de la vida. Le deseo una larga y feliz vida llena de amor y nuevas aventuras. Se lo merece.