Una mujer ve a un pitbull abandonado en el arcén de la autopista y decide socorrerlo de inmediato
Donna, experimentada rescatadora de animales, rescató hace poco a un pit bull de una situación peligrosa en la carretera.
Mientras conducía por la autopista, vio un pit bull y supo que no podía seguir conduciendo.
Se detuvo, se acercó a la perra y la descubrió tumbada al pie de una colina.
El estado de esta pitbull era desgarrador y estaba claro que llevaba allí tirada algún tiempo.
Donna entra en acción
Donna detuvo inmediatamente su coche y corrió a ver si el perro estaba bien.
Le sorprendió que nadie más se hubiera parado a ayudar al pobre perro.
Se preguntó cómo era posible que otras personas no hubieran visto al perro y decidió tomar cartas en el asunto.
Ganarse la confianza
Donna se acercó suavemente al pit bull y le ofreció comida para ganarse su confianza.
La pitbull lo cogió con avidez, señal inequívoca de su hambre y desesperación.
Fue un momento conmovedor que demostró hasta qué punto este perro abandonado necesitaba ayuda.
El siguiente paso era encontrar la forma de poner a salvo al perro.
El pitbull, probablemente traumatizado, dudó en moverse.
Donna intentó animarla e incluso le preguntó juguetonamente si quería que la llevara.
La respuesta del perro fue un suave meneo, signo universal de alegría.
Sin embargo, trasladar al perro no fue tan fácil como esperaban.
El pitbull, posiblemente agotado o asustado, no parecía querer huir.
Sin inmutarse, la mujer, impulsada por su determinación y compasión, decidió cargar ella misma con el perro.
Mientras caminaban de vuelta al Jeep, empezó a llover, lo que hizo que Donna se diera cuenta de que había encontrado al perro justo a tiempo antes de que cayera una tormenta.
Un final feliz
Donna llevó al Pit Bull rescatado a un refugio donde permaneció un tiempo.
Al cabo de una semana, encontró un hogar de acogida cariñoso, donde ha estado bien desde entonces.
El perro descubrió juguetes y le gusta llevarlos para demostrar lo feliz que está.
Gracias a la rapidez mental y la compasión de Donna, el pit bull encontró seguridad y amor.
La historia de Donna nos recuerda que incluso los pequeños actos pueden marcar una gran diferencia en la vida de los animales necesitados.
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