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Una perra hambrienta comió todo lo que pudo para seguir viva tras ser abandonada
Imagínese que se encuentra con un perro tirado sin esperanza en una pequeña perrera un día de frío glacial.
Así era la vida de Prima, que había sido abandonada por sus dueños en invierno.
La pobre Prima estaba muy delgada y comía todo lo que podía para mantenerse con vida, pero eso casi la mata.
Cuando la descubrieron, Prima estaba tan enferma que no le quedaba mucho tiempo de vida.
Rápidamente necesitó atención médica para sobrevivir.
Una llamada de socorro
Dos simpáticos voluntarios, Jannel y Robby, descubrieron Prima mientras paseaban por un parque local de Houston (Texas).
La vieron tumbada en una perrera, sin apenas poder moverse.
El vientre de Prima estaba distendido y se le veían las costillas.
Jannel y Robby sabían que tenían que ayudarla.
Los voluntarios le ofrecieron comida y agua, que ella aceptó con cautela.
"Me quedé de piedra cuando salió. Estaba hambrienta y tenía el estómago muy grande. Inmediatamente empecé a llamar, sabiendo que necesitaba ser rescatada de inmediato", escribió Janell en Facebook.
La misión de rescate
Jannel y Robby se pusieron inmediatamente en contacto con Corridor Rescue Inc, una organización que ayuda a animales necesitados.
Llevaron a Prima con cuidado al refugio, donde recibió comida, agua y atención médica.
A pesar de su miedo, Prima confiaba en que sus salvadores cuidarían de ella.
"Esta chica estaba tan hambrienta que, cuando la abandonaron, se comió todo lo que encontró a su paso y siguió comiendo", escribió Corridor Rescue.
Un diagnóstico terrible
En el veterinario, Prima recibió un diagnóstico desgarrador: enfermedad del gusano del corazón en fase terminal.
Esto significaba que los gusanos de su corazón estaban avanzados y eran difíciles de extirpar.
En ese momento se la consideraba una paciente de cuidados paliativos y el único objetivo de los rescatadores era colocar a Prima en un hogar de acogida cómodo donde se sintiera segura y querida.
Según sus salvadores, Prima llevaba una vida de abandono y sufrimiento.
A pesar de que se desconoce su pasado, está claro que esta perra fue abandonada cruelmente y maltratada, lo que en última instancia provocó que Prima desarrollara un trauma a largo plazo.
Además de su estado físico, a esta chica también le costó adaptarse a un nuevo entorno y a la gente porque estaba gravemente traumatizada.
Última esperanza
Tras una consulta adecuada, el equipo de veterinarios decidió que su única opción sería un tratamiento invasivo y rápido contra el gusano del corazón.
Eso significaba muchas inyecciones en pocos meses.
Este tratamiento era la última esperanza de Prima y el equipo de rescate quiso darle una oportunidad.
También se aseguraron de que le dieran líquidos y comida cada pocas horas y antibióticos para ayudarla.
A medida que Prima se sometía al tratamiento, seguía mejorando.
Su vientre distendido disminuyó y empezó a sentirse mucho mejor.
Todos se sorprendieron cuando sus gusanos del corazón empezaron a desaparecer.
A pesar de los contratiempos, Prima demostró una resistencia y una determinación increíbles para sobrevivir.
Un nuevo comienzo
Tras meses de tratamiento y cuidados, Prima estaba lista para un nuevo capítulo en su vida.
Encontró una familia cariñosa que la acogió con los brazos abiertos.
La nueva familia de Prima le dio el cariño y la atención que merecía y se convirtió en una perra feliz y juguetona.
Gracias a los increíbles rescatadores que no la abandonaron, Luna tiene ahora toda una nueva vida por delante.
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